Los caminos de Viracocha

Presencia en el ordenamiento territorial y urbano

Cuando se quiere hacer un ordenamiento territorial se destacan, primeramente, las virtudes y riquezas de cada lugar para, de esa forma, asignar funciones a los hombres trabajadores que generen, desde sus manos, un bienestar social.

Cuando hablamos de la América Andina en cuanto a éste proceso, nos remitimos a épocas primitivas y a un proceso milenario que han dado lugar a nuestra actual infraestructura y geografía. Éste es un proceso que responde a un desarrollo de una cultura, de cultivo de tradiciones fundamentadas en valores y mitos, aunque suenen antagónicos. 

Francisco Pizarro, al llegar al Tahuantinsuyo en 1532, aproximadamente, encuentra un territorio sumamente organizado, dedicado a labores mineras, agrícolas, entre otras. Entre pueblos, tenían un sistema de comunicación vial, con caminos principales (intiñan, ingañan, capacñan) con una logitud de 8.000 km y, de 30.000 km en caminos secundarios (chaquiñan cuna). en cuanto a los habitantes: Quito 45.00 y Cuzco 80.00, aproxcimadamente.

Viracocha era una deidad, un ser sobrenatural que se manifiesta con dominio en cosas concretas ya existentes; en este caso, era quien cuidaba de la salud y bienestar del territorio del Tahuantinsuyo, particularmente de los caminos imaginarios que lo conformaban. Dichos caminos, los de Viracocha, estaban delimitados por una serie de hitos; un hito es una estructura, natural o artificial, como una montaña o un adoratorio. Generalmente, en los hitos o también llamados huacas, se daban producian hechos que se consideraban dignos de recordar, para lo cual se realizaban sacrificios.

Es importante notar que las huacas no se encontraban deliniando los caminos del hombre; eran lugares donde coincidían o cruzaban los seques con los caminos del hombre.

Para hablar de la fundación de Quito, ancestralmente, se habla de tres leyendas que de fondo son muy similares, pues basicamente cuentan que el cacique o curaca toma un objeto y lo lanza fuertemente; en el lugar donde cae, se dice que, se fundaría lo que ahora es Quito. Por lo tanto, lo que se podría inferir es que en centro de Quito fue donde se alinearon las tres leyendas, consideradas como los Caminos de Viracocha, lo cual ostraría que Quito es un lugar donde se conjugan condiciones especiales, bajo la óptica indígena ancestral.